De manera generalizada podemos parpar que existe una importante lista de retos que deben enfrentar las empresas en un entorno tan competitivo y cambiante como el que hoy les toca enfrentar. No solo se trata de tomar acciones que les permitan perdurar a través del tiempo, sino recorrer el camino, con todas sus implicaciones, para alcanzar un posicionamiento importante dentro del mercado o industria a que pertenezcan.
La aparición de competidores cada vez más numerosos e importantes, la revolución tecnológica de los últimos veinte años y el frecuente cambio de tendencia de los consumidores son solo algunos de los retos que deben enfrentar las empresas. Agregando además, la recurrente escases de recursos y las abundantes necesidades a las que hacerle frente.